Una valiente Selección Española no encuentra premio en la ruta élite masculina del Europeo

La Selección Española ha sido quién ha prendido la mecha del tremendo espectáculo, plagado de alternativas y ofensivas, que ha ofrecido hoy la prueba en línea élite masculina de este Campeonato de Europa de Trento que ha terminado venciendo Sonny Colbrelli para delirio de la afición local.

El combinado nacional, sabedores de que el circuito final no terminaba de adecuarse a sus intereses, ha tratado de aprovechar los 70 kilómetros iniciales, realmente exigentes y que comprendían las ascensiones a Cadine, Vezzano, Vigo Cavedine y Candriai, para endurecer la carrera y buscar situaciones favorables. Así, ha situado por delante a Antonio Soto y a Roger Adriá y posteriormente ha lanzado desde el pelotón durante el ascenso a Candriai a David de la Cruz, Gorka Izagirre y Mikel Landa. Una apuesta valiente que ha sido apoyada por Francia, que ha metido a Pinot, Paret-Paintre y Bonnamour, y que ha llegado a contar con minuto y medio de ventaja.

Desde atrás, Portugal ha sido el combinado encargado de reducir la renta y con el elevado paso que han tenido que poner en la persecución han logrado eliminar a grandes nombres como Sagan, Gilbert, Kristoff, Ganna o Cortina. El grupo cabecero integrado por Gorka Izagirre, De la Cruz y Landa ha logrado coronar con unos 15 segundos de renta sobre el pelotón y poco después de que iniciaran el primer paso por el circuito de Trento han terminado unificándose ambos para integrar una formación de tan solo 60 unidades cuando aún restaban 100 km a meta.

Tras un inicio tan frenético, todo hacía indicar que cabeza de carrera buscaría algún instante de pausa, pero nada más lejos de la realidad. Los ataques no han parado de sucederse, llegando a filtrarse Roger Adriá durante unos kilómetros en algunos de ellos, y ha sido a unos 60 kilómetros para el final cuando se ha producido el movimiento decisivo. Un cambio de ritmo en la subida a Povo ha dejado al frente a Hirschi, Sivakov, Pogacar, Cosnefroy, Trentin, Colbrelli, Campenaerts, Hoelgaard, Hermans y Evenepoel.

Evenepoel, redondeando el trabajo que habían realizado sus compañeros durante todo el día, ha asestado posteriormente un cambio de ritmo durísimo al que solo encontraron respuesta Colbrelli y Cosnefroy. El fortísimo ritmo del belga, que ha sido sin duda quién mejores piernas tenía hoy, ha sido demasiado para el francés, que ha visto como perdía contacto y tenía que conformarse por mantener su posición y conquistar el bronce.

En la aproximación a meta, Colbrelli no se ha mostrado colaborativo con Evenepoel, que no ha podido soltarle antes de llegar a la recta final, donde la mayor velocidad punta del italiano le ha dado la medalla de oro. Cosnefroy se ha hecho con el bronce tras resistir por 14 segundos el empuje con el que llegaba el grupo perseguidor, en el que Trentin ha sido el más rápido por delante de Pogacar para hacerse con la cuarta posición.

Roger Adriá, que ha finalizado 29º en un grupo numeroso a nueve minutos del vencedor, ha comentado tras completar la prueba que “ha sido una carrera muy dura, desde el principio hemos intentado endurecer y no queríamos esperar a que lo hicieran los demás. La idea era buscar fugas y cortes y así hemos hecho. En el circuito hemos pagado un poco eesa generosidad que hemos tenido al principio de carrera y puede que nos hayan faltado esas fuerzas en la parte decisiva. Hemos hecho un buen inicio de carrera, pero creo que esa es la línea”. El ciclista catalán del combinado nacional ha añadido que “ha sido gracias a nuestro ritmo el motivo por el que la carrera se ha hecho muy dura, no ha habido ni un momento de descanso, pero también esperaba algún momento de parón una vez entráramos al circuito, pero no lo ha habido y ha terminado siendo muy exigente”.

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