176 ciclistas tomaban la salida en Irún. La etapa empezaba realmente movida, Cavagna (Deceunink - Quick Step) y Jauregui (AG2R La Mondiale) fueron los primeros en conseguir unos metros de ventaja. Rápidamente, Sütterlin (Team Sunweb), Tim Wellens (Lotto Soudal) y Jetse Bol (Burgos BH) les alcanzaron y formaron la escapada del día. El pelotón no les quiso dar ninguna opción y solo llegaron a tener 3:40” como ventaja máxima. Mientras la caza continuaba, tuvimos los tres primeros abandonos de esta edición número 75: Mathias Frank y Alexandre Geniez (AG2R La Mondiale) y Van Wilder (Team Sunweb).
Después de varios ataques entre los escapados, primero Cavagna y luego Sütterlin y Jauregui, los fugados fueron absorbidos por el pelotón a falta de 25 kilómetros a meta. Momento en el que el ritmo empezaba a ser cada vez más intenso en el grupo de los favoritos.
Elgeta fue el punto elegido
El penúltimo puerto de la jornada, el alto de Elgeta, un puerto de 3ª categoría de 6,2km al 7,7% fue el lugar decidido por el INEOS para tensar el grupo y reducir mucho el número de corredores. Curiosamente, Chris Froome fue uno de los primeros en perder contacto, pero su equipo continuó forzando el ritmo. La tensión era evidente porque la aproximación al Alto de Arrate era complicada, muchos equipos queriendo tomar la cabeza del pelotón y eso terminó provocando la caída de Michael Woods (EF Pro Cycling) al paso por un pueblo. El alto ritmo del INEOS dejó el grupo de favoritos en menos de 50 corredores, antes del último puerto de la jornada.
Arrate hizo las diferencias
INEOS continuaba tensando mucho el ritmo en las primeras rampas de este puerto de 1ª categoría, de 5,3km al 7,7% y continuaba reduciendo el grupo. Aleksandr Vlasov, Mikel Nieve, Daniel Felipe Martínez fueron los primeros en perder contacto con el grupo. Pero fue Sepp Kuss, el norteamericano del Jumbo-Visma, el primero en atacar. Ese cambio de ritmo dejó fuera de combate a Alejandro Valverde, ganador aquí en 2012, y a Tom Dumoulin, otro de los favoritos a La Vuelta. Quedaban solo 8 corredores en cabeza de carrera, Kuss coronó primero el Arrate y es el líder de la montaña, y el resto se lanzaron a por La Roja en los dos últimos kilómetros.
Hugh Carthy se intentó adelantar, pero Primoz Roglic, vigente campeón de La Vuelta, lo tenía todo calculado. Ataque a 1 km de meta, aprovechando que la carretera estrechaba, y nadie pudo seguir su rueda. Victoria de etapa, primer líder de la general y también líder del maillot de puntos. Desde 1994 ningún ganador de La Vuelta empezó ganando la primera etapa de la siguiente edición, el último fue Tony Rominger y lo hizo en una contrarreloj individual. El suizo acabaría ganando esa edición de La Vuelta...
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